APUKO LONG TRAIL 2016

29/10/16. Apuko Long Trail. Última cita elegida por los novatos KKT para cerrar la temporada 2016. Esta vez volvemos a compartir cartel mi compañero y confidente David y un servidor.

Cada vez con más naturalidad y soltura seguimos los rituales previos a la carrera, solo con los nervios justos y lógicos del que tiene delante una prueba de 69 Km y 4300+.

A las 09.00h, con una mañana más que fresca y con buen ambiente se da pistoletazo de salida a los 100 valientes que nos acercamos hasta el frontón de Zaramillo. Como viene siendo costumbre desde el km 1 nos quedamos a la cola del pelotón. La salida es rápida y el ritmo muy alto para nuestras posibilidades. Nosotros como siempre a lo nuestro.

Calentamos poco a poco motores y a ritmo tranquilo pero continuo llegamos a la base de Eretza. Impresionante cortafuegos que se nos presenta delante de nuestros ojos. No había visto cosa igual. Ascenso tranquilo y prudente. Era el Km 4 y había que reservar fuerzas. Llegada a la cumbre e impresionantes vistas que el fantástico día permitía contemplar.

Cumbre tras cumbre sin apenas descanso, descensos a prueba de cuádriceps, el sol apretando cada vez más, y con las pulsaciones más altas de lo debido llegamos a Zalla. Comidita de rigor, quitar las piedras de las zapatillas y gas. Corrían las 16.00 h y el Km 37.

Bien de fuerzas y mejor de ánimo afrontamos el siguiente tramo hasta Güeñes. El trazado no daba tregua, pero el sol iba dejando de apretar y eso relajó nuestras pulsaciones, pudiendo aumentar un poquito el ritmo. El marcado del camino era traicionero y obligaba a estar muy atento para no perderse. Nos llegamos a perder por el cambio intencionado de las balizas de alguien que quería hacer la prueba más entretenidaJ. Tuvimos suerte y solo fueron 2 Km de pérdida. Llegada a Gueñes, Km50 y presentables para afrontar el último tramo. Llenar depósitos, reponer fuerzas y nuevamente al tajo.

Corría el Km 55 aproximadamente cuando encendimos el frontal. Era una incertidumbre saber cómo íbamos a afrontar la noche tras 10 horas de camino, y más al tratarse de un cambio que nunca habíamos entrenado, es decir, el empezar de día y terminar de noche (siempre había sido al revés). Pero para nuestra sorpresa el cambio nos activó las cada vez menos fuerzas que nos quedaban y nos “enchufo” para afrontar las últimos desniveles. También nos ayudó el toparnos con el entonces cuarto clasificado de la ultra y ver que podíamos mantener su ritmo con bastante facilidad.

Y así llegamos a la base de Apuko, última y muy exigente cumbre que daba por concluida la prueba. La prudencia durante la ascensión fue máxima porque había claro riesgo de quedarnos a cero de gasolina, hecho que a varios participantes les ocurrió, entre otros al cuarto de la ultra que desde los primeros pasos del ascenso se nos quedó muy atrás.

Pasado este último corte y ya con ánimos de victoria, afrontamos al son del speaker (que desde la cumbre era perfectamente audible) la frenética y peligrosa bajada a Zaramillo. Desde el inicio iba a quedar nuevamente claro que el ascenso a una cumbre no termina hasta que no se desciende de ella. Nuevamente con máxima prudencia y con objetivo claro de no hacerse daño afrontamos el descenso hasta que media horita después pisamos tierra firme.

Corrían las 22.30 h cuando tras 71 Km oímos los gritos de nuestras familias. Con el ya habitual subidón, con nuestra carrera claramente ganada y con nuestros vástagos en la mano, cruzamos la siempre deseada y ansiada línea de meta. Nueva victoria personal, y como en las anteriores ocasiones triple objetivo cumplido: llegar presentable, disfrutar de la prueba y no hacernos daño. En este caso añado otro más: terminar una prueba de este tipo partiendo de un alto nivel de cansancio que mi actual situación laboral me obliga día a día a acumular.

Cierro la crónica con un agradecimiento especial hacia mi compañero David, que supo días antes de la prueba dar la vuelta a mis claras intenciones de abortar la salida. Supo dar donde me duele, y no hubo opción a decir que no J. Dos entrenos previos intensos con muy buenas sensaciones ratificaron que la decisión que había tomado de colgarme el dorsal era la correcta.

Tercera para el carné, y a pensar poco a poco en la temporada que viene.

Gora KKT!

Borja